Podemos afirmar que, hoy en día, definir una red social solamente como ese lugar público donde poder compartir experiencias, momentos o aventuras, y generar conversaciones o debates es algo que ha quedado bastante obsoleto. Si bien es cierto que esa faceta no va a perderse -dado que siempre se mantendrá como el eje vertebral de las redes sociales-, hoy en día ya no sólo hablamos de compartir fotografías de vivencias y hazañas cuando hablamos de ellas. Hoy, las redes sociales son mucho más.
Hace unos años, nadie hubiese podido entender (ni siquiera imaginar) que las redes sociales iban a convertirse en uno de los focos principales para captar tendencias de moda del momento. Gracias a esos canalizadores de marketing que llamamos influencers, que surgen de la nada y crecen como la espuma, las redes sociales han ayudado a aumentar las ventas de las marcas de moda (y no tan de moda), dando un giro drástico en el proceso de compra de los clientes: en nuestros días, lo normal es identificar los productos susceptibles de compra en las redes sociales.
Y, gracias a los influencers -esos jóvenes que utilizan la moda como forma de vida-, muchas marcas impulsan la venta de sus productos otorgando a estos individuos un gran peso dentro de sus partidas de marketing, y solamente a cambio de una sola fotografía con sus productos compartida en los perfiles públicos, en numerosas ocasiones con más seguidores que los de las propias marcas.
Por lo tanto, si hablamos de esa nueva forma de impulsar el marketing a través de las redes sociales, podemos afirmar que 21 Buttons ha dado en el clavo, con una red social creada directamente para vender productos de moda impulsados (entre otros) por influencers.
Una red social que, allá por 2015, fue creada por Marc Soler y Jaime Farrés, en su intento de conectar (muy visionariamente por aquel entonces) las redes sociales con la compra de las prendas retratadas por los usuarios en ese mismo medio. Y, es que, como todo en el mundo 2.0, no hay nada más potente que detectar un nicho de mercado sin cubrir: el de la compra a través de las redes sociales.
Y, ¿sabéis por qué? Porque, a diferencia de otras redes sociales como Instagram o Facebook -en donde el usuario únicamente puede ver la imagen de marca de los productos que llevan sus influencers más queridos-, en 21 Buttons puede visualizar directamente el precio, redireccionando, además, a la página web de la marca. De esta manera, ofrece al usuario la información necesaria para culminar un proceso de compra de manera exitosa, con todos los canales perfectamente fusionados. Un proceso de compra que, en muchas ocasiones, suele ser impulsivo.
Por lo tanto, teniendo en cuenta lo anterior, es fácil deducir que -en muchas ocasiones- las empresas utilizan el Social Commerce (que, dicho en otras palabras, se trata del uso de redes sociales para ayudar en la compra y venta en línea de productos y servicios) en sus planes de marketing, convirtiendo a 21 Buttons en la herramienta perfecta para situarse a la vanguardia de las nuevas tendencias sociales, a través de la interacción entre consumidores y la generación de experiencia omnicanal, en donde no existe fisura alguna entre los canales que componen la experiencia de compra.
Emplear 21 Buttons en tu estrategia Social Commerce podrá reportar a tu empresa de los siguientes beneficios:
En resumidas cuentas, integrar canales como 21 Buttons en tu estrategia de Social Commerce fomentará el entorno omnicanal (que no multicanal, ya que generamos una unión perfecta entre canales) en tu empresa, afianzándose como un elemento clave a la hora de tomar decisiones por parte del consumidor, fielmente ligado a las tendencias de moda impulsadas por sus influencers más adorados.
Así que… ¿A qué esperas para crear tu propia comunidad de buttoners en la red?